Seguro que muchos de vosotros ya habéis conocido a Spot, el perro robot de Boston Dynamics. Es una máquina linda y versátil, pero es hora de que Spot conozca a su padrino. Aquí es donde entra en juego Xiaomi con su ciberperrouna versión más intimidante del robot amarillo, con un par de cámaras como miradas heladas.
El cachorro en sí representa el primer paso de Xiaomi en la industria de la robótica… De cuatro patas, y el CyberDog fue la estrella de una presentación algo estridente que destacó la flexibilidad de la que es capaz.
¡Siéntate, acuéstate, rueda, chico!
Xiaomi hizo el anuncio sorpresa ayer, con CyberDog entrando en el centro de atención con una serie de movimientos acrobáticos. El robot es capaz de realizar maniobras rápidas y, por qué no, dar algunos saltos, pero lo interesante está relacionado con las opciones que ofrece y los componentes que alberga bajo el «piel».
CyberDog puede alcanzar una velocidad de hasta 3 m/s, sus movimientos están asegurados por 11 sensores, una serie de servomotores propietarios y la plataforma Nvidia Jetson Xavier NX, es decir, una solución de IA que integra dos motores de aprendizaje profundo, 384 núcleos CUDA y 48 núcleos tensoriales.
Xiaomi brinda a los curiosos la capacidad de dar comandos de voz al robot, como palabras de activación y diferentes instrucciones. A esto se suma el control de CyberDog a través de una aplicación de teléfono.
Ingenieros de CyberDog: «¿Cuántos sensores quieren que integremos?»
Xiaomi: «Sí»
El fabricante menciona que el robot tiene mucho más que esos 11 sensores. El resto del arsenal está representado por sensores táctiles, cámaras de foto y video con IA, varias lentes, como ojo de pez, binoculares y ultra anchas, módulos de profundidad y GPS, pero también sensores GPS.
Si hablamos con más detalle de las cámaras, están equipadas con un procesador de IA capaz de rastrear objetos, por lo que CyberDog puede ubicar y etiquetar objetos, todo mientras evita obstáculos con precisión al moverse. Estos ocurren en tiempo real, pero la verdadera calidad de mascota proviene del hecho de que CyberDog tiene reconocimiento facial, por lo que puede rastrear a su amo sin dejar que juegue Candy Crush en paz desde el trono.
El fabricante saca al mercado un interesante concepto de robots de código abierto
Xiaomi menciona que CyberDog se basa en una plataforma de código abierto, lo que brindaría a los usuarios la posibilidad de agregar nuevas funciones, como sensores LIDAR, proyectores y cámaras panorámicas. El robot incluso cuenta con dos puertos tipo C y una entrada HDMI para que los desarrolladores puedan instalar complementos de software más rápido.
No está claro si Xiaomi pondrá a disposición de los usuarios el código fuente de CyberDog, pero el hecho de que el robot se base en algoritmos de código abierto no hace más que ampliar el abanico de posibilidades en el campo de la robótica. El desarrollador ya ha producido 1000 unidades de CyberDog, poniéndolas a disposición de quienes lo deseen, y solo puedo admitir mi interés en este tema.
Bromas aparte, tengo curiosidad por saber cómo se usará CyberDog para otra cosa que no sea un periódico matutino o una mesa de café. Su versatilidad es aún mayor ya que la plataforma de código abierto puede convertirse en el hogar de todo tipo de opciones prácticas y creativas. En el polo opuesto, Spot (Boston Dynamics) ya está disponible para el público, con varias copias contribuyendo al alivio del impacto negativo de la pandemia.
Pudimos ver a lo largo de los meses cómo se usaba Spot en parques y calles para recordar a las personas la necesidad del distanciamiento físico, al igual que se usaba en clínicas y hospitales para facilitar el proceso de triaje de pacientes. Esto plantea una pregunta: a medida que la tecnología avanza a pasos agigantados, y las ideas fascinantes de los libros de Asimov o los éxitos de taquilla irónicos como Terminator, ¿cómo pueden ayudarnos los robots? Cuán creativos podemos ser para que la relación humano-inteligencia artificial sea mutuamente beneficiosa.
Sí, tal vez me excedí un poco con la especulación, pero a veces es mejor bordar al borde de una idea como CyberDog, que reírse de Xiaomi por simplemente poner una roomba con piernas en tus brazos.